El Parque es un reducto de paz frente al Parque Chacabuco. Sobre la calle Emilio Mitre al 300, casi en la esquina de Eva Perón. Otro de los pocos cafés que se resisten a la tentación de atormentar a la clientela con música funcional o televisores. El único testigo del presente es el diario del día, disponible para su lectura. Su puesta es sencilla. No tiene pretensiones. Imágenes racinguistas, San Cayetano, frascos de aceitunas, Hesperidina y Cynar. En el Parque se habla castellano. Quiero decir: castellano con acento castizo porque sus dueños no lo han perdido desde que llegaron a la Argentina hace más de 50 años.
El Parque es un refugio ideal para meditar, pensar, leer, mantener una charla sin tiempos. Queda justo frente a la salida de la Estación Emilio Mitre de la línea E de subtes. O sea, toda persona que a diario entre o salga del subte sin regalarse unos minutos (más $ 11) para tomar un café no entiende nada de la vida. Entrar en El Parque es mimarse. Regalarse unos minutos para uno mismo. Y a toda hora como dice su vidriera!!!
O quizás es uno de los tantos miles que realiza ejercicios dentro del Parque Chacabuco. Pues bien, ya sabe donde recuperar energía, pero sobre todo el eje humano. El Parque armoniza. Es un cable a tierra. Ahora, si el plan es una cita, en el semáforo de la esquina, Fernando, el florista, soluciona cualquier olvido involuntario. No se lo pierdan.
Qué lindo leer esto. Qué lugar hermoso. Leerme el blog me inspiró y terminé tomandome un break del trabajo en un bar de Ecuador y Valentín Gómez (Once) tomándome un cortado y medialuna de manteca. Ahora te doy follow en instagram. Saludos!!
Mery tenes un café pago!
En serio? En El Parque?
En el alma que es más saludable.