En la categoría de Cafés Gourmet de Buenos Aires, Le Blé, con sus seis locales, es un jugador importante. A mí particularmente el que más me atrae es el de Chacarita, en la esquina de Dorrego y Vera que no respeta los 90° tradicionales de las ochavas porteñas dándole un carácter que lo distingue de sus «hermanos». Un auténtico rincón Chaca-Chic.
Le Blé es una Boulangerie & Patisserie que enriquece y compite, con cuidadas propuestas y celoso respeto a la estética, en el cada vez más amplio campo de cafés franceses franquiciados que existen en la ciudad. Los mozos lucen uniformes al estilo parisino, las mesas tienen tapas de mármol y también cumple con las tradicionales y amplias «comunitarias».
En el afán de los porteños de llamar a Buenos Aires como la París de Sudamérica, Le Blé apoya la idea. Pero también se demuestra conocedora y respetuosa de las tradiciones locales ofreciendo tres diferentes tipos de café:
- Café porteño: en vaso de vidrio (¡GENIOS!)
- Le Blé: en un gran tazón para los amantes de largos momentos con su fiel compañía
- Expreso: el típico pocillo
La puesta en escena incluye largas estanterías con diferentes panes, croissants, muffins, mermeladas, etc.
Le Blé-Chacarita es ideal para reunirse a mantener una charla sin tiempos, o perderse dentro de un libro que dejamos pendiente para la oportunidad apropiada, o solo mirar por las ventanas la paz barrial que transcurre bajo la sombra de los plátanos. Cualquier parecido con la realidad en las afueras de París no es mera coincidencia.
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